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EDEKA Adebahr ha reinvertido sus beneficios y reformado la filial de EDEKA actual situada en una terminal de tranvías de 120 años de antigüedad en la ciudad centroalemana de Herzogenrath. En un área de casi 2000 m² se ha creado una experiencia de compra nueva y adaptada a los mayores requisitos de los clientes. Los techos elevados de hasta ocho metros de altura, las estructuras originales de vigas de acero al descubierto, las columnas divisorias, las paredes de ladrillo visto y las ventanas arqueadas en los laterales plantearon un desafío especial para el diseño de la iluminación.
La instalación de las luminarias a una altura de 4,20 metros –aproximadamente un metro por encima de su colocación habitual– ha permitido ganar espacio visual, un efecto que es subrayado por los carriles electrificados instalados en paralelo con respecto al pasillo. Para garantizar el alumbrado deseado de las superficies sin generar sombras, los especialistas luminotécnicos renunciaron al uso de sistemas de iluminación lineales y utilizaron en su lugar luminarias de reflectores que iluminan toda la superficie de las estanterías en los lineales de manera precisa, gracias a sus posibilidades de ajuste por etapas.
Las vías principales y las zonas periféricas del supermercado se han acentuado con un mínimo de luz difusa. Para ello, Ansorg colocó unos sofisticados bañadores de luz bidireccionales a 3 metros de altura. La adición de spots de luz puntual permitió dotar a la iluminación de acentos variados.